El amor en los tiempos del chat

Foto Francois Benveniste

El busca el amor desesperadamente. Lo ha buscado en la Universidad, en el gimnasio, en la oficina, en algun bar, en los supermercados y hasta en los diarios. Hoy ha decido buscarlo en el chat, como tantos otros atormentados. Un chat triste y oscuro, lleno de falsas ilusiones, de desengaños , de desencantos, amargura y disgustos. Casi siempre es lo mismo, y sin embargo sigue multiplicando los contactos. Un contacto de Mexico, otro en Argentina, en Venezuela, en Italia, en Canada y hasta en el Japón.

Los dias transcurren y él ya no quiere entrar mas, pero el chat le atrae de manera irremediable, ineludible, inevitable. Ha encontrado en el chat la manera de ocupar el tiempo y llenar sus noches solitarias que son mas tristes aún.

Aquella noche iba a rendirse, a doblegarse, a claudicar, como casi cada noche. De pronto un contacto simpatico. Ella parece agradable, su conversacion es amena y divertida. El esta encantado, fascinado, hechizado. Las horas se volatilizan, se esfuman, el amanecer comienza a hacer su entrada. Dos meses han pasado, y cada noche ellos se encuentrar en el mismo chat. 

Ella lo sueña, él la imagina. Una noche, ella se arma de valor y pide una foto, él escoge una con su mejor sonrisa. Ella lo encuentra atractivo. El a su turno pide una foto, ella duda, él insiste. Ella dice que no quiere desilusionarlo, él aclara que lo de la foto es una formalidad ; que él solo piensa en ella, que sus almas han nacido para encontrarse. Ella titubea, él insite, ella se decide y envia cruzando los dedos su fotografia.

El mira la foto, parpadea, hace un zoom, se frota los ojos, la analiza y piensa. Para ella la espera es interminable, él no dice nada ni una frase, ni un comentario, ni un punto de exclamación. Ella vence el miedo y pregunta « Sorprendido ? ». El responde que si, y aclara que que eso no cambian sus sentimientos, mientras suspira viendo la foto de otro hombre con ojos de caramelo a quien ha decido amar sin complejos.